Llega septiembre y con él el año nuevo para los papás y no tan papás. Y es que, desde que tengo uso de razón, los años empiezan en septiembre, con el curso escolar. El Mozo confiesa desde la otra ala de la casa (AKA Mordor) que a él le pasa exactamente lo mismo.
Así que tras este breve parón, el blog vuelve y es que tengo mucho que contar (ya sabéis, incontinencia verbal).
Para empezar, que nos fuimos de camping con la Habichuela. Ya os contaré pero fue todo un éxito. ¡Y qué deciros de la Habichuela! Que se pone de pie. Que la alimentación complementaria me hace hiperventilar y reír a partes iguales. Que está supergraciosa y alegre y dicharachera . Que me la como a besos todos los días y ella me la devuelve arracándome unos cuantos pelos
Continuaremos con las obras de Mordor que se nos están complicando un pelín demasiado. Quicir, que tenemos ya baño "nuevo" (o al menos uno en el que podemos bañar a la peque sin morirnos del asco) y trastero operativo. Lo malo es que el seguro nos ha levantado el parquet del pasillo, tiene que venir un pintor a sanear el asunto... en fin. La Sagrada Familia hecha casa de los horrores. Seguiremos informando por ese lado. Además, no hay mal que por bien no venga y es que cuando algún día de estos vengan a arreglarme el parquet, tendremos que huir otra semana de vacaciones.
No puedo dejar de contaros que la pocket casa hobbita, situada en lo más alto de la más alta torre ya está alquilada. Dos días tardamos en dar con el inquilino perfecto (ojalá lo sea) lo que nos deja por un lado con un buen sabor de boca (la casa están tan chula que todo el mundo se la quería quedar) y por otro lado nos inunda la pena. Y es que hemos sido tan felices en esa casa que tengo miedo de que no me la cuiden como merece.
No me he olvidado de enseñaros la casa, no. Ya tengo los post casi terminados (lástima de mano pocha, que me ha impedido trabajar en todas las entradas que tenía previstas).
Y es que confieso que me ha petado del todo la mano. La tengo inmovilizada y escribir a una mano me complica la existencia, así que si no llegan entradas no es que se me haya jubilado la musa si no pensad en mi y en mi pobre mano biónica. Férula ortoprotésica lo llaman... Ya os digo yo que es como un guante manga to chulo pero que en lugar de lanzar rayos y truenos hace que se me caigan los tenedores de la mano y que cambiar a la Habichuela se convierta en una suerte de película truculenta para no pringar de cacorra la susodicha férula. Resumiendo: que a la Habichuela la cambia el Mozo ^_^.
Y por supuesto que seguirá habiendo historias de suegras y suegros. Ya os voy adelantando que ayer fui azotada en el culo al salir de su casa tras la visita. Una palmada así, como quien arrea a las vacas. Es TAAAAN mona >_<.
¿Cómo se presenta vuestro nuevo curso? ¿Qué tal esas vacaciones?