Esta entrada no es una entrada en la que arroje una solución milagrosa a algo. No. Esta entrada es un llamamiento desesperado para que me deis TIPS a mi todos vosotros. Así, con todo el morro.
Y es que, cuando yo estaba embarazada de Habi, la gente tenía a bien forzar una sonrisilla y decirme:
- ¡Ay! Aprovecha para dormir, Hobbita, que luego no podrás.
Y doy fe. El descanso se vuelve, digamos que reguleras. Pero lo llevé bastante bien. Y con la Pulga la verdad es que también duermo bien, teniendo en cuenta la situación.
Lo que no llevé nada bien y nadie me advirtió del tema, fue lo de las comidas.
Y es que NO se puede cocinar con un bebé.
Ale, ya lo he dicho.