12 meses

Mi amor. 12 meses ya y no pude escribirte a tiempo este post. Ya te acostumbrarás a estas cosas de tu madre (y de Mordor) pero hija, fue imposible transcribirte estas palabras antes del domingo pasado.

Has cumplido 1 año, bebé. Ya mides 72 cm. y pesas 8,240 kg. Estas hermosa, grande y ágil y demuestras tener una inteligencia de lo más avispada. Estás muy simpática y cada día es más divertido (a la par que cansado) estar a tu lado.



En motricidad sigues en tu línea. Una vez dominado lo que viene siendo el deambular como una botellita borracha, has decidido que lo tuyo es el saltar obstáculos y correr. Lo bueno de todo esto es que he perdido todos los kilos del embarazo y alguno más. Lo malo es que a este paso voy a desaparecer. Y eso que yo soy de naturaleza despreocupada y confío bastante en tu criterio pero hay que andar con mil ojos contigo porque a la que me descuido, te metes en algún lío.

En la calle quieres andar así que hemos empezado a ponerte zapatos. Hasta ahora ibas en calcetines o calzotillas por la vida pero la verdad es que, pese a mi reticencia inicial, has aceptado muy bien tus peque-barcas. Me lo esperaba muchísimo más traumático y en mi imaginación me veía buscando desesperada el zapato que hubieras perdido durante el paseo. Nada más lejos de la realidad: te los ponemos y ale, echas a andar.

El lunes me diste la mano por primera vez y caminamos juntas más de veinte minutos. Y yo derretida mientras tú caminabas toda derecha y orgullosa ^_^.

Empiezas a meter un objeto dentro de otro y ya encajas el círculo en la tortuga de encajables. El resto de formas todavía te cuesta y no apilas torres pero te encanta que yo las arme y arremeter contra ellas cual Godzilla enfurecido.

Te gustan mucho los juguetes musicales y el regalo estrella del cumpleaños ha sido el tambor Patapum con todos sus instrumentos de percusión. Y el Juguete Infernal, del que ya tengo post pero aún no está transcrito >_<. Empiezas a prestar atención a los cuentos y nos los traes para que pasemos hojas. En dos días de práctica ya las pasas tú sola fenomenal.

Sigues con tus baluceos y te encanta oirte gritar. Aún no formas ninguna palabra reconocible pero te haces entender perfectamente. Has aprendido a decir adios con la mano, a dar besos (aunque das pocos) y te encanta dar palmas y bailar moviendo el culo al ritmo de la música.

Empiezas a imitar: te 'lavas' con jabón en la ducha, te 'peinas' con tu cepillo y nos das de comer a todos, Perrucha Chucha incluida. Utilizas la cuchara con más o menos éxito y pinchas con el tenedor. Pinchas patatas, zanahorias, kiwis resbalosos y demás alimentos pero sin duda lo que más te gusta pinchar es la Perrucha Chucha. Lo dicho: hay que ir con mil ojos para que no vayas toda feliz a clavarle el tenedor en el lomo. La Chucha te lo permite porque la sobornas con pan, que te he visto, pero yo no te dejo. ¡Pobre Perrucha!

Eres increiblemente sociable y le pides brazos a todo desconocido que te entre por el ojo. También arrancas sonrisas gracias a las tuyas y, auque algún berrinche empiezas a coger, te duran poco y es fácil distraer tu atención hacia otro lado.

Te gusta estar en compañía de otros bebés y yo aprovecho y procuro juntarte con niños todos los días. Vamos al rin para bebés, al parque, a ver a tus amiguitas... ¿quién dijo que la guardería era tan necesaria para socializar?

El martes tocaron vacunas y tuviste fiebre pero ni por esas perdiste la alegría. Además, confieso que aproveché para hacer piel con piel contigo, que `parece que esos tiempos pasaron a la historia.

Comes muy bien y todo lo pruebas. La verdad es que da gusto estar contigo en la mesa aunque cada vez más protestas por estar en la trona y muchos días claudicamos y te damos de comer con el repostaje en vuelo, término acuñado por tu papá, AKA El Mozo.

Cada día que pasa parece que te queramos más aunque cada día que termina me diga que es imposible quererte tanto. Y acaba la noche y llega el día y me sorprendo mirando tu carita que me enamora todavía más.

Feliz cumpleaños (con casi una semana de retraso), mi niña. El mes que viene te cuento más cosas.

¿Como recordáis los 12 meses de vuestros peques? ¿Qué grandes hitos alcanzaron?