Sello de calidad: pañales dodot

Hace un par de semanas, la Habichuela y yo acudíamos al evento #PapásDodot (donde nos hicieron fotos a Habi y a mi y pudisteis desvirtualizarnos un poco) y unos días después nos seleccionaron para participar en el sello de calidad de Madresfera sobre los susodichos pañales. Tras una pequeña odisea con la entrega de los pañales, por fin tenemos el paquete en casa.

¿Y por qué os digo que fue una odisea? Pues porque ya sabéis que yo me mudé de Hobbiton a Mordor pero había olvidado actualizar la dirección en Madresfera. Como no soy tan lerda como pensáis, en cuanto me apunté al sello, me percaté del tema de la dirección así que, rauda y veloz, actualicé los datos. Y ya está.

Pero, ¡ay, amigos! Las cosas del Internet y la tecnología no van así y unos días después, viendo que mi paquete no llegaba y que nos instaban a escribir el post sobre la cata de pañal yo empecé a mosquearme un poco. Y, ¡bingo! Justo ese mediodía, me llamó un repartidor cabreado porque estaba timbrando en casa y nadie le abría. Por supuesto, dicha casa estaba en Hobbiton. 

Como una es una Hobbita de bien, se cameló al repartidor para que entregara el paquete en la casa de la Abuela, que vive unas manzanas más abajo de la más alta torre y así lo hizo, permitiéndome recuperar un poco la fe en el espíritu humano (¡gracias repartidor desconocido! Fuiste un solete ^_^).

Por lo tanto, ya tenemos aquí los pañales. Solo necesitábamos un culo bien dispuesto y el elegido fue el de nuestra pequeña tester, AKA la Habichuela. Pena es que por peso nos mandaran la talla 3 cuando ella, por culo, ya usa la 4 (es culona como su madre, su Abuela y su Bisabuela, que le vamos a hacer) pero bueno, para lo que viene siendo la prueba nos sirve ya que esta talla llega hasta los 10kg de peso y Habi no llega a los 8'5kg.

Nosotros solemos utilizar en casa pañales de marca blanca (aunque debo confesar que empiezan a tentarme los pañales de tela pero mi cerebro consciente se resiste a la invasión). Últimamente estamos utilizando los del Alcampo. Porque salen baratos y porque tengo un Alcampo a tiro piedra aquí en Mordor. Por lo tanto, voy a compararlos con estos porque me han salido bastante buenos.

La primera diferencia radica en el tacto. Dodot es así como papel aterciopelado por fuera y los de Alcampo tiran más a plástico. Esta cobertura de Dodot se parece más a los que he probado del Lidl o de Carrefour aunque estos dos no tienen textura aterciopelada si no que son más bien como papel gordito. A mi el exterior me da un poco igual al tacto pero si que he notado una sensación como que la humedad nocturna traspasa en el Dodot. El caso es que luego es una sensación no real. Es decir, tengo sensación de que el pañal está húmedo por fuera pero la ropa está perfectamente seca. 

En el interior hay más diferencias. Los pañales de marca blanca tienen el absorbente hasta un punto concreto. Que a mi, que soy un poco bruta, me sirve como marca para depositar el culo de mi bebé y hacer el ajuste perfecto. En dodot el absorbente se extiende hasta casi la espalda o al menos yo lo veo así. Además, Dodot se extiende en celdillas azules y las bolitas se reparten a lo largo de tres tubos. En los demás pañales las bolitas hacen paquete y bolsa sin recorrer túbulos. Ignoro que tipo de disposición es mejor o peor a la hora de la absorción porque no tengo escapes de pis con prácticamente ninguno. Puntualizaré que cambié a la talla 4 porque sufría escapes de pis y en cambio con Dodot, si bien el pañal está a rebosar por la mañana, no hay escape alguno (y son una talla menos que en las marcas blancas). 

Los escapes de caca ya no son tan frecuentes porque mi hija, estando ya con alimentación complementaria, hace cacotas tipo plasta o bolita así que ya no hay que temer por tsunamis de caca traicioneros. Aquí dodot también aprueba y no hemos sufrido percance alguno.

En cuanto al respeto por la piel del culo de mi bebé, todos se la tratan con cariño. Y es que mi niña es una todoterreno a la que le da igual ocho que ochenta así que en el tema de los pañales no iba a ser diferente. Y eso que por las mañanas el pañal le deja la piel un poco húmeda (de cualquier marca) pero simplemente hago el cambio de pañal, seco bien la piel y a correr. 

Por lo tanto, tras la prueba con dodot confirmo que:

1. Necesito usar una talla menor para lograr la misma absorción que con su pañal habitual. Sin embargo, una talla más me vendría mejor para lograr un ajuste más cómodo y no tener la sensación de envasar a la Habichuela al vacío.

2. La composición del pañal respeta la piel de mi bebé y no hay escapes reseñables ni de pis ni de caca.

3. El precio de Dodot sigue siendo tan elevado que, pese a ser más agradable al tacto, a mi particularmente no me compensa comprarlos ni siquiera en oferta. Encantada de utilizarlos pero creo que seguiremos con nuestra marca blanca.

¿Vosotros sois fieles a Dodot o también sois infieles a la marca por excelencia en favor de las marcas blancas? ¿Cual es vuestro motivo para decantaros por unas u otras marcas?