Evitando... el estreñimiento

Otro problema que aqueja a las embarazadas con frecuencia es el estreñimiento. El estreñimiento es un síntoma muy molesto y que hace que lo pasemos muy mal. Yo no soy estreñida de por si y en toda mi vida habré vivido cuatro o cinco episodios que, sinceramente, espero no repetir.

Si sois estreñidas por naturaleza, como mi madre, supongo que estaréis acostumbradas al uso de laxantes, enemas y supositorios (como mi madre). En mi opinión es un error utilizar estos procedimientos por sistema. A ver, son útiles en caso de constipación grave (jiji, siempre me encantó que en la carrera llegara el tema de la 'constipación') pero utilizados por sistema hacen que nuestros intestinos se vuelvan 'vagos' o, más concretamente, que no funcionen correctamente sin la utilización de sustancias irritantes que lo estimulen. Así que si es vuestro caso, intentad dejar a un lado estos sistemas paliativos que pueden acabar exacerbando el problema. 

Para evitar el estreñimiento hay que cumplir con la base de una dieta sana (que parece que no pero hoy en día cada vez comemos peor), beber abundante líquido (lo que viene siendo agua, no refrescos azucarados) y hacer algo de ejercicio (moderado, no hace falta matarse hasta la extenuación).

Una dieta sana para paliar el estreñimiento va a incluir:

Consumo de agua. Haced la prueba: dejad de beber y automáticamente vais a estreñiros. Muchas personas se quejan de que son incapaces de beber los 2 litros diarios recomendados (entre ellos mi madre). Creedme, me ha costado años conseguir que mi madre beba de un modo normal. Me explico. Cuando le dije que tenía que empezar a beber agua para evitar el estreñimiento hizo lo que el anuncio del famoso laxante: se bebió prácticamente un litro de agua de una sentada, pasándolo muy mal. El estreñimiento no mejoró y se pasó toda la mañana en el baño... para hacer pis. 

Hay que beberse los dos litros de agua, si, pero REPARTIDOS a lo largo del día. El truco para que mi madre bebiera fue regalarle una botella de cristal cual ánfora que tiene puesta al lado del ordenador en la oficina. Va dándole pequeños sorbitos y al final casi consigue la ingesta diaria. Por la noche todavía es imposible convencerla porque dice que se hace pis, así que se niega a beber pasada cierta hora del día ¬_¬. #cosasdemadres.

Por otro lado hay que disminuir la ingestión de grasas ya que éstas provocan un retraso del vaciamiento gástrico y todo el recorrido por el intestino se ve afectado puesto que su digestión es más lenta. Esto no significa eliminar las grasas si no que las que ingiramos sean saludables (aceite de oliva, girasol...). Si eliminamos de golpe todas las grasas vamos a tener como resultado estreñimiento  que es lo que pasa en las dietas de adelgazamiento hiperrestrictivas. Justo lo contrario de lo que deseamos.

Además, tenemos que aumentar el consumo de fibra. Sin embargo, existen dos tipos de fibra, la soluble y la insoluble y tenemos que tener claro que nuestro estreñimiento no se debe a algún problema médico tipo diverticulitis, puesto que en estos casos ciertos tipos de fibra estarán vetados en nuestra dieta (así que ya sabéis: diagnóstico médico siempre por delante). Obviamente si vuestro estreñimiento está ligado con el embarazo, no vais a tener problemas médicos de ese tipo. 

El ejercicio MODERADO es también nuestro aliado. Caminar 45 minutos al día, natación, pilates.... Cualquier cosa que haga que nuestro cuerpo esté activo y en forma. 

La progesterona es la hormona que, durante el embarazo, va a provocar ese estreñimiento tan molesto. La progesterona es así: ella tiene que dejar todo bien relajadito para que no haya contracciones donde no debe haberlas. Claro que a veces no discierne y también te relaja los músculos que deberían estar contraídos. Contra esto no podemos ni debemos hacer nada ya que esta hormona es la que está manteniendo nuestro embarazo. Si además nos han recetado progesterona, vais a notar este molesto efecto secundario (y lo digo con conocimiento de causa: durante mi reposo , sin poderme mover y hasta arriba de progesterona, viví uno de estos episodios de los que os hablaba al principio).

¿Qué hice? Obviamente ejercicio no podía hacer, retirar la progesterona tampoco era una opción así que me quedaba la dieta. Aumenté un poco el consumo de agua (y por consiguiente las ganas de hacer pis pero, sinceramente, prefiero el pis a la constipación) y, añadí lo siguiente a mi dieta:

- Higos: aprovechad, que el verano se acaba y luego van a estar prohibitivos y sabrán a corcho. Ahora mismo me tomo unos tres higos al día, como caramelos. Podéis tomarlos secos también pero a mi no me gustan tanto y están muy concentrados en azúcar.

- Kiwis: en verano están prohibitivos pero en invierno son una opción asequible.

- Manzanas: no sé porqué la gente tiene la manía de decir que las manzanas estriñen. Es mentira. Una manzana al día, con su piel si podéis (yo tengo que pelarla o desinfectarla con lejía y ambas cosas me dan mucho tedio) y veréis que mejora tan espectacular del estreñimiento en apenas dos días. Mi madre ha dejado (por fin) los laxantes. 

- Almendras: el puñadito de almendras a medio día no me lo quita nadie.

- Guisantes y brécol cocido: como guarnición.

- Zanahorias: yo me las como crudas y a bocaos porque aunque no sea una coneja en la vida real (snif :'( )si lo soy en el subconsciente. Podéis rallarla para ensaladas o batirla pero intentad que sea en crudo. Que cocida también tiene sus propiedades, pero es mejor en crudo para el estreñimiento. 

- Legumbres: garbanzos, judías y lentejas, en orden de mayor a menor cantidad de fibra insoluble. 

Hay muchos otros alimentos que os pueden ayudar pero a mi estos son los que me gustan. Yo no soy de zamparme semillas de lino con agua templada por las mañanas, el salvado de trigo me hace sentirme un canario a dieta y no puedo con el muesli y demás inventos all-bran. Si os gusta lo integral, genial, pero si no, hay alternativas sabrosas. Para mi la comida está hecha para disfrutar y solamente hay que variar un poquito los hábitos para conseguir una dieta saludable. Si lo que os manda la del herbolario no os gusta vais a acabar fracasando porque os lo dejaréis de tomar. 

Y para finalizar, la pregunta escatológica que todos estamos esperando: ¿Sufristéis 'constipación' durante el embarazo? ¿Cómo la paliasteis? ¿Aparecieron las temidas hemorroides? (Cielos, creo que las temo más que a las estrías)