Yo confieso: Soy mamá gamer

Pues si, lo confieso. El título ya lo dice todo. Y es que, como ya os he ido contando, Habi es una bebé estupenda pero que tiene muy claro lo que le gusta y lo que no.

¿Y qué es lo que más le gusta en el mundo? Estar en brazos de mamá, bien cerquita del pecho. ¿Y eso a dónde nos lleva? A que mamá, osease, yo, tiene que buscarse la vida para poder hacer cosas.

Ya os he contado un poco mis armas pero os las resumo:

- Porteo, porteo y más porteo

- Cojín de lactancia.

- Cama.

Desde la cama, poco puedo hacer salvo dedicarme al móvil. Benditos smartphones (nunca pensé que diría esto). Esos ratitos suelo dedicarlos al blog, contestaros en la medida de lo posible (no puedo explayarme lo que me gustaría desde el móvil pero algo es algo y mira, al menos os leo. También sigo intentando entenderme con twitter y Facebook. Reconozco que la mitad de los días me duermo con esta opción pero, ¡oye! Las mamis merecemos utilizar este sistema como el que más :p.

El porteo lo utilizo prácticamente para todo en casa. Hago las tareas (no demasiado cómoda, pero las hago), paseo arriba y abajo, voy al baño (lo del baño no deja de ser un show) y lo más importante de todo: duermo a Habi.

Y el cojín de lactancia ha sido todo un descubrimiento. Cuando ya no puedo más y necesito sentarme y Habi está en modo altímetro de precisión. Y gracias al bendito cojín he descubierto una nueva faceta en mi vida:

LA PLAY

>_<

Y es que, amigos, la Hobbita se caracteriza por ser torpe con los videojuegos de consola. Nunca he tenido videoconsola propia, nunca me he manejado bien con los mandos y lo más importante: nunca me he entendido con el 3D. Es un hecho. Yo corro con un mono muy simpático que parece borracho cuando está a mis órdenes, llego hasta el plátano, salto y.... el plátano estaba o delante o detrás pero nunca donde salto U_U. Eso cuando llego hasta el plátano. Generalmente me caigo por algún barranco.

Pero con Habi a la teta las mañanas pueden llegar a hacerse muy largas. En la tele llevamos así como un mes con los dichosos pactos electorales que tienen de pacto lo que yo de monja y solo sirven para llenar horas y horas de televisión sin llegar a nada. Las series me mola seguirlas con el Mozo. No estoy en modo película y leer... bueno, leer no cuesta y sigo devorando cuentos y novelas :p.

El caso es que el jefe del Mozo le regaló en Navidad la Play 3 porque se había comprado la play 4. Y con ella un mogollón de juegos. Y un buen día, el Mozo puso el Skyrim (en casa conocida como 'Es Curry') y me piqué. Y dos semanas después, yo confieso:

- Que 14 mañanas dedicadas en exclusiva a jugar mientras mi peque modorrea hacen que yo,torpe entre las torpes, me sepa manejar con el mando.

- Que más que jugar a la play, parece que estoy operando intestinos, tal es la postura que adopto para no molestar a mi peque.

Obsérvese la postura de los codos e inténtese mantener durante un par de horitas

- Que el cojín de lactancia demuestra ser un gran aliado permitiendo que Habi duerma o coma mientras su madre aporrea...juega a recoger florecillas y mariposas por el monte. Y de vez en cuando, que leches! Reparte unas cuantas galletas a algún bandido que se ponga farruco.

- Que a falta de hobbitas, me he hecho una elfa pero que el próximo personaje va a ser toda una lagarta!

Y vosotros, ¿como pasáis las mañanas en las que vuestro peque se duerme sobre vosotros y no podéis moveros durante horas so pena del follón que se arma al despertarlo? ¿Sois de la generación gamer? (BellaBlack! Tu no vales, que ya sabemos que eres una auténtica mamá gamer!