Ahora que ya he vivido un embarazo en mis propias carnes con panza gloriosa en pleno invierno puedo hablar con conocimiento de causa acerca de la ropa premamá que las primerizas necesitamos durante esta estación.
Hace bastantes meses ya que publiqué este post acerca de mis dudas primerizas sobre este tema y a día de hoy creo que están todas bastante solventadas.
Mis conclusiones, a día de hoy son:
A) Que no, no hace falta invertir un dineral en ropa premamá.
B) Se puede ir aparente y resultona pese a tripotas e hinchazones varias. Reconozco que me caracterizo por tener un estilo pelín zarrapastrosil pero os aseguro que también soy capaz de ponerme mona si la ocasión lo requiere.
Hoy os presento la ropa premamá que he utilizado durante este invierno. Alguna me la he comprado yo y otra me la han prestado. No he hecho un desembolso demasiado grande, sinceramente y mucha de la ropa NO es premamá si no que es de la sección normal que encontrarías en cualquier tienda de ropa. A mi favor diré que los hados se han puesto de mi lado en esta ocasión ya que este otoño-invierno no se han llevado las toreras ni los trajes entallados lo que me ha facilitado la vida. Eso si: advierto que yo soy bastante frugal con la ropa y al final he tirado de 4 combinaciones. Si sois unas locas de la moda supongo que vuestra inversión tendrá que ser mayor.
He aquí los, en mi opinión, imprescindibles para una mujer que va a pasar la mayor parte de su embarazo (sobretodo la última etapa) en invierno: