jueves, 28 de mayo de 2015

Leche de almendras casera



Las leches vegetales del supermercado están muy bien, muy completas, enriquecidas con calcio y minerales y vitaminas y.... azúcar! Además son caras por lo que estoy probando a hacerme las leches en casa, totalmente caseras y sin aditivos. 

Yo ya había preparado horchata hace tiempo. La horchata no deja de ser otra leche vegetal, sencilla de hacer y queda muy buena cuando la haces casera (no soporto la del brick) así que me lié el delantal a la cintura y manos a la obra. 

Tras mi éxito con la leche de coco (que quedó muy buena pero que no me valía para tomar un vaso de leche para desayunar por la textura tan grasa que deja) me decidí por la leche de almendras que es la única leche vegetal comercial que he tolerado (y por tolerancia me refiero a mis papilas gustativas). El resultado ha sido excelente por lo que os dejo aquí la receta.

domingo, 24 de mayo de 2015

Balance. Semana 1

Además de seguir el diario de facebook, he pensado que puede ser una buena idea ir plasmando en entradas semanales las sensaciones que han ido quedando así como los éxitos y fracasos de este experimento tan personal. 

En esta primera semana de dieta 'en serio' he seguido investigando el mundo de las intolerancias. He visitado montones de blogs para celíacos y alguno que otro de intolerantes a lactosa/proteína de la leche. En cuanto a la celiaquía, la información existente en Internet es amplia y las recetas de la blogosfera, abundantes. Ya tengo unas cuantas referencias para empezar a fabricar mi propio pan, aunque con la tontería lo he ido posponiendo. Los blogs basados en experiencias dietéticas de personas con déficit de DAO brillan por su ausencia. Solamente he encontrado el blog profesional de una nutricionista catalana pero está más orientado a su profesión que a dar solución al día a día de las personas que tenemos (aparentemente) este problema. Pese a ello me resulta un blog 100% interesante por ser esta hipótesis tan novedosa en el tratamiento de la migraña. No dejéis de visitarlo.

De lo que si me he dado cuenta es de que, pese a haberme empapuzado bien de las diferentes historias de la gente, me surgen exactamente los mismo problemas. No se qué comer y eso causa ansiedad. 

Esta primera semana ha estado plagada de arroz. Me encanta el arroz pero entendedme: me sale por las orejas.

miércoles, 20 de mayo de 2015

Leche de coco casera




Al retirar de la dieta los lácteos he tenido que buscar alternativas para sustituir a la leche y sus derivados tipo nata. Hasta el momento, las leches comerciales de soja, avena, arroz, etc, me resultan bastante vomitivas. Ni me gusta su textura ni su sabor. La de almendras me gusta mucho pero lleva azúcar añadido por lo que está vetada para esta primera fase de mi dieta anti-migraña. 

Una buena amiga deportista que tuvo que abandonar también los lácteos me recomendó preparar leches vegetales caseras. Me he iniciado con la leche de coco que me juró y perjuró que era la más parecida a la leche de vaca. 

Tras el experimento constato varias cosas:

La primera es que me encanta la leche de coco como ingrediente para cocinar. Ha resultado ser una estupenda alternativa a la nata en mis preparaciones habituales de pollo y salsas de pasta (que ahora son salsas para arroz :p)

La segunda es que como sustitutivo de la leche.... ¡Ngá! El café (descafeinado, recordad que los estimulantes están prohibidos) sabía extraño y demasiado graso para mi gusto y sola me pasaba lo mismo: un trago bien pero más no. 

La tercera: no es para unas prisas. Las leches vegetales no son especialmente complicadas de hacer pero requieren de su preparación del campo de trabajo y un buen montón de herramientas. 

La última pero no por ello menos importante: NO la guardéis en botellas bajo ningún concepto. La Hobbita, en su hobbitez más absoluta lo hizo y tras una noche en la nevera, la leche se decantó en dos capas, una blanca (el coco) y otra transparente (el agua). El coco solidificó y no había forma de sacar la leche ni de agitarla para que se mezclaran las dos capas. Tuve que utilizar un palillo chino para atravesar la capa solidificada y poder empezar a mezclar las capas. Así que apuntad el siguiente Consejo Hobbito: esta leche se guarda en tarros de boca ancha para poder meter una cuchara y darle vueltas antes de utilizarlo. Dixit!


Lista de alimentos permitidos



Como no todo iban a ser desgracias, publicaré ahora la lista de alimentos que me permiten comer. De momento me voy apañando pero ya he tenido mis más y mis menos en el supermercado. 

Allá va:

  • Cereales sin gluten: arroz, maíz (ambos con moderación, algo que estoy inclumpliendo por el excesivo precio de los que me permiten ad-libitum), trigo sarraceno, quinoa, amaranto, mijo. 
[7€. ¡SIETE! Que se dice pronto, me pidieron hace un par de días por 500g de quinoa. Investigaré por internet pero de momento esta parte de la dieta queda automáticamente modificada por la hobbita en paro forzoso]

  • Verduras. Hoja verde (acelgas, espinacas, berzas...), calabacín, zanahoria, cebollas, ajo, alcachofas, apio, hinojo, nabo, puerro, cardo... PROHIBIDA la col, especialmente la fermentada (chucrut).
  • Proteínas animales: intentar reducir la ingesta de proteínas animales a 1 ración al día. Mejor pescado que carne y mejor blanco que azul. 
  • Legumbres
  • Frutos secos: almendras, piñones, avellanas
  • Frutas: manzana, pera, piña (aquí hay controversia entre las distintas fuentes. Yo la voy a poner en mi dieta que para quitarla ya tendré tiempo).
  • Especias: no me las han prohibido ni permitido pero voy a ir haciendo pruebas con ellas para decidir si las incorporo o las elimino totalmente de la dieta. 
  • Agua: beber mucha agua (2-3 litros al día). Yo en esta parte no tengo problema pero se que muchas personas si. IMPORTANTÍSIMO seguir este consejo para evitar estreñimiento, deshidratación y crisis migrañosa derivada de lo anterior.  
La imagen es de aquí


Pues esta exigua lista es la que tengo para elaborar maravillosos platos que me hagan la vida un poco más feliz. De primeras encuentro problemas para hacer sofritos y sobretodo para desayunar. Estoy a base de huevos, pero teniendo en cuenta que ciertas fuentes advierten de la clara de huevo como un liberador de histamina endógena. Lo dicho. A observar. 

martes, 19 de mayo de 2015

Lista de alimentos prohibidos


La dieta que se va a seguir para tratar de limitar las crisis de migrañas prescinde no solamente de alimentos si no también de ciertas formas de preparación. Como me interesa que todos estos conceptos queden muy claros desde el principio, separaré en diferentes post tanto los alimentos prohibidos, como los permitidos, así como las técnicas culinarias que tendremos permitidas o prohibidas utilizar. 

En esta primera fase de ataque a la migraña la dieta que se puede seguir se conoce como Dieta Básica. Poco a poco, según vaya respondiendo el cuerpo, podré ir añadiendo o quitando alimentos o grupos de alimentos hasta dar con la combinación que se adapte a mi. Porque si alguna conclusión saco de las migrañas, es que cada persona es un mundo y lo que me las provoca a mi puede no provocárselas al migrañoso de al lado. 

Empezaremos con la lista de alimentos prohibidos, los que debemos retirar de la dieta si o si. Aclarar que esta lista es orientativa. Yo voy a retirar todos los alimentos de golpe porque tengo prisa y estoy un poco harta. Pero entiendo que si no es posible retirar todos, no se haga o se haga paulatinamente. 

Allá va la lista que me entregaron y que me dejó ojiplática la primera vez que la vi:

lunes, 18 de mayo de 2015

Me retiran la medicación



El legrado que tuve en enero acabó con una parte de nuestros sueños. La vida es así, te da unas cosas y te quita otras. En mi caso además de perder el bebé se me descontrolaron absolutamente las migrañas. 

Desde el embarazo las crisis son prácticamente constantes. No había semana en la que no necesitara medicarme. Una vez pasó la intervención pensé que, como las migrañas parecían hormonales, todo volvería a la calma. Estamos acabando mayo y cada vez estoy peor. Así que tomé la decisión de volver al neurólogo para ver que podíamos hacer. 

domingo, 17 de mayo de 2015

Felicidad, consciencia, pérdida



En noviembre me quedé embarazada. El positivo lo tuvimos en diciembre y fue un subidón impresionante. Después de 7 meses buscando bebé por fin lo teníamos. Un par de meses antes decidí empezar a opositar viendo que el tema no terminaba de cuajar y que las perspectivas de encontrar un trabajo decente con mi edad (mujer en plena edad fértil) y profesión (veterinaria, el trabajo en el que menos me han pagado, más responsabilidades he tenido y más horas he echado) escaseaban. Obviamente, Murphy se cruza en tu camino: si quieres quedarte embarazada y no lo consigues, hazme caso: apúntate a una oposición y mete un jamón ibérico navideño en casa (si eres toxoplasma negativo). Te quedas seguro.

Cuando tuve en mi mano el positivo ocurrió algo curioso. Fui consciente de pronto de que ya no estaba sola. De que éramos dos. De repente era consciente de mi ser, de mi vulnerabilidad. Cuando andaba no lo hacía automáticamente: sabía que me podía caer.

No dejaba de ser una sensación curiosa, la verdad. Nunca he sido torpe, nunca me ha importado tropezarme o comerme el suelo. Realmente es algo que no me ha preocupado porque no suelo tropezar ni caer al suelo y por eso esa súbita consciencia del mundo que me rodeaba me impresionó.

Fui consciente de que ya era Mamá.

Con las semanas se me fue pasando. Me hicieron una primera eco, lo vi pequeño pero latiendo. Era oficial: estábamos embarazados.

Hicimos planes, pensamos nombres, le hablamos.

En enero vino la tortura. Mi bebé dejó de crecer pero no de latir. Fueron tres semanas horrorosas de revisión en revisión, ecografías semanales, saber que la cosa no va bien pero aferrarte a un clavo ardiendo por si la esperanza asoma a la puerta. Nunca llamó. En la tercera ecografía dejó de latir, me ingresaron de urgencia y me hicieron el legrado.

sábado, 16 de mayo de 2015

La dieta antimigraña


Mi formación como veterinaria hace que me haya informado mucho, muchísimo antes de iniciar cualquier experiencia sobre mi propio cuerpo. Mi condición humana me predispone para intentar probar cualquier artículo milagroso que prometa acabar con el dolor. Este experimento es uno de los últimos cartuchos que me quedan, así que tendré que encontrar un equilibrio entre mi espíritu científico y crítico y mi parte emocional que busca el milagro de la cura. 

Recientes estudios nos hablan del déficit de DAO como una posible causa de las migrañas. Desgraciadamente no puedo afirmar ni desmentir que estos estudios sean correctos ya que, por el momento, el único estudio que he podido encontrar sobre el tema lo ha realizado la empresa que comercializa los productos que, en principio, ayudan frente a esta patología. A partir de ahí que cada uno saque sus propias conclusiones.

viernes, 15 de mayo de 2015

Presentación

La imagen es de aquí

He creado un blog... una vez más. Sin embargo, esta vez no es de prueba. En esta ocasión necesito dar un vuelco a mi vida y espero que el blog me ayude a conseguirlo. 

Tengo 30 años y la verdad es que no he llegado nada mal:

  • Tengo mi pocket-casa para hobbitos, pequeña, acogedora y con mucha luz que te hace sentir en paz cada vez que estás en ella. No es broma: muchos amigos, al entrar en la casa, sienten exactamente lo mismo que sentí yo cuando entré con el Señor de la Corbata de la inmobiliaria.