Mostrando entradas con la etiqueta bimaternidad. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta bimaternidad. Mostrar todas las entradas

martes, 13 de agosto de 2019

¿Cuánto deberían llevarse los hijos?

¿Y tu me lo preguntas?

Pues mira, voy a dar mi opinión sincera y contrastada después de un año largo como bimadre. 

No hay momento perfecto. 

Porque yo tenía claro, clarinete que la edad perfecta era que se llevaran entre 2 y 2'5 años. Ya sabes: así juegan juntos, así pueden compartir más cosas porque están más cerca en su desarrollo evolutivo.... Y tras mi experiencia os diré que si pero no. 

miércoles, 6 de junio de 2018

¿Cómo se come con bebés?

Esta entrada no es una entrada en la que arroje una solución milagrosa a algo. No. Esta entrada es un llamamiento desesperado para que me deis TIPS a mi todos vosotros. Así, con todo el morro. 

Y es que, cuando yo estaba embarazada de Habi, la gente tenía a bien forzar una sonrisilla y decirme:

- ¡Ay! Aprovecha para dormir, Hobbita, que luego no podrás. 

Y doy fe. El descanso se vuelve, digamos que reguleras. Pero lo llevé bastante bien. Y con la Pulga la verdad es que también duermo bien, teniendo en cuenta la situación.

Lo que no llevé nada bien y nadie me advirtió del tema, fue lo de las comidas.

Y es que NO se puede cocinar con un bebé.

Ale, ya lo he dicho. 

jueves, 31 de mayo de 2018

La depresión postparto. Sintomatología en primera persona

Como os contaba en ESTA entrada, me han diagnosticado la temida depresión postparto y aquí sigo, lidiando con la bestia (con mucho más éxito que al principio, he de decir).

Y todo esto me tenía bloqueado el blog. Porque tengo muchísimas cosas de las que hablar pero, ¿como iba a hablar de ellas sin contar lo que realmente estaba pasando por esta cabecita hobbita de bien? Así que, pese a tener entradas escritas, decidí no publicar nada hasta que estuviera preparada para hablar de la depresión postparto en primera persona. Y eso estoy haciendo ahora mismo. Ante todo, disculpad si el post queda extrañamente redactado puesto que es un tema complicado desde el punto de vista personal. Este es un post muy íntimo, de una enfermedad que no le deseo a nadie pero que está ahí. Que todas podemos pasar y que se sale. Yo aún no, pero desde luego estoy mucho mejor que al principio. De ello dan fe unas cuantas amigas blogueras virtuales (¡hola Ariel! ¡Hola Soñadora! ¡Hola Hisosaki!) y reales (hola Hirosaki, again! ¡Hola Amiga con conocimientos!:p)...

A lo que voy. Este va a ser un post muy personal, probablemente un poco fuertecito en lo que voy a decir y me encantaría no acabar recibiendo como reciben muchas madres cuando hablan de este tema. Supongo que es algo a lo que me expongo pero necesito sacarlo fuera. De nuevo, incidir en que me da la sensación de que son enfermedades con tratamiento a largo plazo y que no me van a dar el alta en bastantes meses (aunque me encantaría que me dijeran que esto en dos telediarios se cura). Que podría hacer un compendio de datos y más datos sobre que es y que no es la depresión postparto y daría un poco igual porque es una información que tenéis a golpe de google en cuanto queráis. Lo que voy a contar es como me dio a mi, mi sintomatología, mi saber 'que algo no va bien' (creo que ya se intuía en el post que hice sobre el babyblues) y el sentimiento de culpa, o más bien rabia, por no saber salir del pozo. Por supuesto yo recomiendo que, si alguna de las que leéis el blog os sentís identificadas con algunas de las situaciones que voy a relatar, pidáis cita con vuestro médico de cabecera. Porque puede no ser DP o puede serlo. Y si lo es, es peligrosa y tenéis que estar en seguimiento por el sistema de salud.

Y sin más dilación, vayamos al lío.

viernes, 13 de abril de 2018

La lactancia en tandem



El tema de la lactancia era algo que me tenía relativamente preocupada durante el embarazo. Ya sabéis que me dio agitación en las tomas nocturnas hacia la mitad del embarazo y eso provocó el fin del colecho de Habi con mamá (que no el fin del colecho de Habi con Papá). Poco a poco las tomas se fueron espaciando y entre que ya mamaba en seco y que por la noche no necesitaba teta para dormir, a mi me parecía que mi niña se estaba destetando de la mejor manera posible. El destete respetuoso soñado, vaya. 

Llegó un momento que Habi solamente me pedía teta cuando se asustaba. Por lo tanto, todo bien. Y de repente, un buen día (concretamente dos días después del parto)... me volvió a salir leche de las tetas. Y teníais que haber visto la carita de Habi, esos ojitos brillantes, la boca llena de leche, la sorpresa pintada en el rostro pálido:

- Mami. ¡Leche! ^_^.

Y si, amiguitos. La leche volvió, Habi entró de lleno en los dos años y todas juntas estamos viviendo lo que se conoce en el mundo lactante como:

LA TRACA FINAL

miércoles, 7 de marzo de 2018

Babyblues



En esta segunda maternidad que estoy viviendo las cosas se han desarrollado de una forma muy distinta a como fue con Habi. Ya conté en otros post que me había dado tristeza postparto en esta ocasión y me gustaría reflejar un poco lo vivido que, aunque no ha sido en absoluto agradable, ha sido una realidad de la que se habla cada vez más, pero como de pasada. 

Y es que el babyblues es algo completamente normal que le ocurre entre un 60 y un 80% de madres y que no es más que un desajuste hormonal. O al menos eso dice la teoría.

¡JA!

viernes, 2 de marzo de 2018

La importancia de la tribu

Vuelvo por aquí a saludar y a contaros que no es que esté desaparecida por el caos en el que se ha convertido mi vida con el aterrizaje en la bimaternidad si no porque... ¡he conseguido tribu de mamis en Mordor!

Si, amiguitos. Más de un año después de que esta familia hobbita aterrizara en Mordor, la Hobbita aquí presente ha conseguido encontrar amigas con niños en un radio de acción CERCANO. 

Y es que la clave de la tribu está en la cercanía. De nada me sirve tener unas cuantas amigas si las tengo repartidas por toda la geografía de Madrid (o mi mejor amigo que directamente está en Holanda y me pilla pelín a desmano).

¿Como lo he conseguido? Pues en parte por mi constancia y cabezonería y en parte porque se me alinearon los planetas. ¿Por qué digo esto último?

lunes, 29 de enero de 2018

Aterrizaje accidentado en la bimaternidad

Llevamos 10 días como bipadres en esta casa hobbita de bien y ya hemos tenido nuestros primeros problemas. El principal ha sido de engranaje de la pareja. Por un lado, el Mozo me reconoce que no está acostumbrado a hacer nada de la casa y que aún le cuesta darse cuenta de lo que hay que hacer (¬_¬). Por otro lado, a mi me dio un baile hormonal importante en la primera semana y lo único que me apetecía era arrancarle la cabeza. Así, de buen rollo y sin anestesia (:$).

Lo bueno es que somos una pareja que, otra cosa no, pero hablar hablamos así que ya hemos tomado algunas medidas importantes para no enloquecer en Mordor. Para empezar, hemos cogido a la asistenta dos veces en semana, a ver si así sale el atasco de tareas adelante. También estoy haciendo importantes esfuerzos por relajarme, tomar distancia y no hablarle a gritos aunque ello suponga tardar hora y media en despertarle, que la niña no cene hasta las 23h y que mis tardes pasen entre estertores de hambre y sed porque viandas y bebidas tardan eones en salir por la puerta de la cocina. Por otro, hemos aprovechado para hacer pequeñas reformitas que eran de vital importancia para lograr acoplar el baño a dos bebés. 

viernes, 26 de enero de 2018

Día a día con dos bebés: la movilidad

Tenía pendiente escribir esta entrada desde hacía días, cuando una lectora me pidió que le contara como iba a hacer en el momento en que la Pulga viniera al mundo teniendo en cuenta que Habi sigue siendo un bebé.

Como últimamente no me daba la vida para escribir, atender a Habi, la casa, etc, lo fui dejando, lo fui dejando y.... nació la Pulga :D. Sin embargo, aprovechando que el Mozo está en casa (como dice Hirosaki, la crianza debería ser a cuatro manos mínimo), que se ha llevado a Habi de papeleos y que yo estoy con mi Pulga encima cual mamá gamer de nuevo, voy a aprovechar para contar cómo lo voy a hacer yo (de hecho, como lo estoy haciendo).

En muchos foros se menciona la posibilidad de comprar carro gemelar y apañarte con eso. En mi caso esto no se va a hacer. Por varias razones: