lunes, 31 de julio de 2017

Visita a la matrona (i)



Del seguimiento de este segundo embarazo he hablado poco porque todavía estoy asimilando y tomando decisiones acerca de lo que me está pasando. Vamos a ver si consigo poner un poco de orden y contaros lo que me he encontrado en este primer trimestre de gestación. 

Para empezar ODIO Mordor. No se si os lo había dicho ya. Resulta que mi centro de salud es 'pequeño' así que no tienen matrona. Total, que me han asignado una matrona donde Cristo perdió el gorro, a más de media hora en autobus, perdido entre chalets de los que no sale nadie. La primera (y por el momento última consulta) no empezó nada bien. ¿Por qué? Pues porque después de peregrinar hasta allí, con una Habichuela poco colaboradora en la mochila, con un calor que te mueres y bastante malestar por los vómitos, la matrona salió y preguntó por una tal Teresa (que obviamente no era yo). La matrona me preguntó si estaba citada y le dije que si (me habían citado esa misma mañana junto con los análisis de sangre). La matrona me dijo que era imposible porque no tenía más pacientes que la tal Teresa. Le dije que a mi me habían dado la cita esa misma mañana y que a lo mejor no se había actualizado el sistema pero que por favor me atendiera. Me dijo que solamente lo haría si no se presentaba la tal Teresa. La tal Teresa nunca se presentó porque resulta que mi cita la habían expedido a su nombre, una señora de más de 70 años (probablemente la que estaba justo antes que yo en la fila). Pues me tuve que poner borde para que me atendiera, al borde del llanto.

viernes, 28 de julio de 2017

Semana 14



La semana pasada por una serie de problemas de diversa índole, no hice entrada de síntomas. Básicamente: acabé en urgencias con una migraña estupenda. Habi se quedó con los abuelos. Yo estuve hasta altas horas de la madrugada en el hospital y al final pedí el alta voluntaria para marcharme a casa. Cosas del directo. Nota mental: hacer entrada de mis últimos encontronazos médicos.

Total, que ya vengo esta semana a contar que tal me está yendo, que aunque nos hayamos saltado una semana, tampoco pasa nada. Quedan todavía muchas por cumplir. 

miércoles, 26 de julio de 2017

El destete nocturno (I)



Ahora que ya medio tenemos un cuarto Habichueril (o al menos tenemos un colchón tirado en el suelo y el suelo relativamente despejado de trastos) hemos empezado con el destete nocturno de la Habichuela. ¿El motivo? La teta de noche ha dejado de funcionar, como os contaba en esta entrada así que, ante la imposibilidad de conciliar el sueño, el Mozo y yo hablamos y decidimos intentar que Habi empezara a dormir en su cuarto.

Tras meses leyendo foros y alternando con otros padres, nuestra decisión ha sido hacer una transición paulativa. Vengo a contaros nuestro método, lo que hemos elegido y si funciona o no, que ya sabemos que con los niños, dos más dos no suele ser cuatro, pero por supuesto no tiene porque servir o funcionar en otra familia. Mi recomendación es pensar un poco la situación familiar, ver que cuadra más y hacer un pupurrí con diferentes m etodologías hasta lograr el objetivo. O al menos es lo que nosotros hacemos en casa.

lunes, 24 de julio de 2017

Preparando cuarto de Habi (I)

Cuando nos mudamos a Mordor lo hicimos principalmente por su única cualidad: tiene chopocientos metros cuadrados. Ahora bien. Desde que nos mudamos a Mordor, hace ya casi un año, la casa nos ha puesto a prueba en inumerables ocasiones. 

Y es que Mordor es un mausoleo. El mausoleo de mi padre. Entre que es una casa de la que no tengo buenos recuerdos, que la disposición no nos gusta, que no le da la luz así la mates (miento, le da la luz justo cuando NO quieres que le de la luz >_<) y que está preparada al uso y gusto de mi padre, Mordor desespera. 

Mi padre. Poco he hablado de él y creo que aun no estoy preparada para explicar mucho sobre él. Sin embargo es necesario que os cuente algún pequeño detalle para que comprendáis lo que significa pelear contra Mordor. 

lunes, 17 de julio de 2017

Crisis de lactancia



Hace mucho tiempo que no hablo de lactancia en el blog y es que no es algo que me haya dado demasiados problemas. ¿os acordáis, lo nerviosa que me tenía el tema antes de tener a Habi? Pues a la hora de la verdad la lactancia ha ido rodada en mi vida. Ni grietas, ni dolores más allá de un pelín de escocedura los primeros días, buena subida de la leche, buena ganancia de peso... El par de obstrucciones (que no llegaron a ser doloras) y poco más.

La teta era algo maravilloso: no solo daba alimento de forma cómoda y rápida (si la niña tenía hambre, teta fuera y san seacabó). También consolaba cuando se daba uno de esos cachiporrazos que hacen historia y, sobretodo, la dormía en cuanto tenía un poquito de sueño. 

Pues esta idílica historia se acabó. La teta se ha roto, señores. Ya no funciona. 

viernes, 14 de julio de 2017

Semana 12



Hoy cumplo la semana 12 de embarazo según FUR aunque en la última visita al ginecólogo me devolvieron de un bofetón a la semana 10 de embarazo, ajustando la edad gestacional al tamaño del embrión. Ya sabéis que yo hago embriones pequeños así que vivo en una perpétua semana de la marmota. 

Durante esta semana los cambios no han ido a mejor con respecto a la anterior, la verdad. Ya sabéis que van empeorando. Si que es cierto que he dejado de sangrar por las encías y que no tengo ni lumbago ni ciática pululando por aquí lo cual es un alivio, sinceramente. 

Vayamos con los síntomas.

miércoles, 12 de julio de 2017

Cosas de Habichuelas: la visión colilla



Habi no tiene problemas de visión. Tiene una vista aguzada de aguililla y unas manos rápidas cual pico de urraca. Y es que de un tiempo a esta parte su padre y yo sufrimos cada vez que salimos a la calle. Y es que entre los superpoderes de nuestra pequeña judía está la Visión Colilla: no hay cigarrillo consumido que esté a salvo de su mirada. Ella sale a la calle y las detecta allá donde estén.

El tema de las colillas es recurrente en los niños. Lo he visto en multitud de ellos a mi alrededor y se lo he leído a unos cuantos papás blogueros. No por ello se convierte en mal de mucho, consuelo de tontos. 

martes, 11 de julio de 2017

Si yo fuera una jirafa



Boolino vuelve a mandarnos un cuentecillo para amenizarnos las tardes y de nuevo, acorde a la edad de la Habichuela. 

Eso si, con el cambio de cartero por vacaciones ha habido un problemilla con la entrega. Directamente le echaron la carta en el buzón a mi vecino del E. La cosa habría quedado ahí si no fuera porque mi vecino del E no vive en su casa así que hasta que no han venido a limpiar, recoger la correspondencia y ventilar sus dominios, no ha llegado el cuento a mis manos. 

Una vez solucionado, Habi pudo disfrutar de su nueva historia de jirafas. Y es que esta niña tiene una extraña relación con este animal. El Mozo dice que es su animal totémico xD. Tiene un montón de cuentos de jirafas, un disfraz de jirafa, le encanta imitar el berreo de las jirafas... Es tan bonita...

Así que este cuento tenía que ser un éxito si o si. 

Y lo ha sido.

Es muy sencillo, con un mensaje repetitivo, reiterativo, enseñando las partes del cuerpo y comparándolas con las de una jirafa. La parte de la jirafa son fotografías y la parte dedicada al cuerpo de la niña, dibujitos. Cada fotografía acota una curiosidad sobre las jirafas.

A Habi le gusta mucho y me lo trae a menudo. Además ya empieza a interactuar con el cuento. A mis preguntas, señala con el dedo en la fotografía o señala su propio cuerpo. Aún no sabe donde tiene las pezuñas pero todo se andará, dadme tiempo :p.

¿Conoceis libros similares para aprender las partes del cuerpo?

lunes, 10 de julio de 2017

Visita a urgencias



El viernes tuvimos la primera visita a urgencias de este embarazo, no por nada sangrante ni doloroso que proviniera del útero si no por los vómitos. Lo que durante estas semanas de atrás era una continua sensación potosa digievolucionó en vómitos incontrolables desde primera hora de la mañana. 

Además, el día no acompañó. Me tocaba ir a la primera consulta de ginecología de la SS. El centro me lo han puesto donde Cristo perdió el gorro, como el de la matrona, que también está lejos. Me estoy planteando el traslado a O'Donell ya no por hacer allí o no el parto (que me lo sigo pensando), si no porque creo que tardo hasta menos yendo hasta allí que yendo al del barrio. 

Así que nada. Habichuela a los lomos, aguantarse las ganas de potar y lanzarse a las calles. Mierda. No me he aguantado. Hay una pota en un árbol. No pasa nada. Sigamos, como si nada hubiera pasado. Semáforo, vamos bien... ajá... No vamos bien. ¡Otro árbol! ¡Otra pota! Autobús. Aguanta Hobbita. Bajando.... ¡POTA! ¿Dónde puñetas está este sitio? ¡Pota! ¡Oh! ¡Parece que lo diviso, allá a lo lejos, Capitán! Tierra. ¿El baño, por favor? POTA.

Y lo mismo a la vuelta. 

viernes, 7 de julio de 2017

Semana 11



Pues ya estoy aquí. Sin saber como ni cuando, hemos llegado a la semana 11 de gestación. Una lástima no haber contado las anteriores aunque no varían demasiado respecto a esta pero ya sabéis que es que no estaba demasiado operativa. 

A diferencia de Habi, este segundo (tercero en mi caso) embarazo está siendo desagradable físicamente hablando pero tranquilo a nivel emocional y mental. #2 está creciendo tranquilo, bien implantado, con su latido como debe ser, sin pérdidas (miento, tuve algún manchado entre las semanas 7 y 9 pero lo asocio a manchado de implantación) ni hematomas. No estoy teniendo que hacer reposo de ningún tipo más allá del que me pide el propio cuerpo y la verdad es que la paz mental es algo maravilloso.

Vayamos con los síntomas:

miércoles, 5 de julio de 2017

Alta en urología



Esto tendría que haberlo contado hace unas cuantas semanas, que es cuando pasó pero mi parón forzoso por malestar preñil lo impidió. Y es que, ya está, ya hemos pasado lo chungo. La ectasia piélica de mi niña ha remitido por completo y hace dos semanas obtuvo el alta oficial en urología. 

No hemos llegado a los temidos dos años, momento en el que me avisaron que valorarían si entrar o no a quirófano para cateterizar esos riñones. Habi ha crecido, ha madurado y lo que quiera que estuviera obstruyendo esos uréteres ha desaparecido dejando unas hermosas y normales pelvis renales detrás. 

martes, 4 de julio de 2017

La Hobbita está hecha un higo



Cuánto tiempo sin pasarme por aquí, ¿verdad?

Y es que, como dice el título del blog, este embarazo no está siendo todo lo bueno que debería, físicamente hablando. Ahora que me he abonado al equipo del Cariban puedo empezar a sentarme a escribir pero la verdad es que cuesta. 

Cuesta porque Habi no para. Está en una edad en la que todo es movimiento, alegría y alboroto (bueno, y momentos drama queen también, no vayamos a mentir) y a mi lo que me apetece es derrumbarme en el sofá, lánguida cual damisela victoriana con corsé y mirar al infinito. FIN.