La importancia de la tribu

Vuelvo por aquí a saludar y a contaros que no es que esté desaparecida por el caos en el que se ha convertido mi vida con el aterrizaje en la bimaternidad si no porque... ¡he conseguido tribu de mamis en Mordor!

Si, amiguitos. Más de un año después de que esta familia hobbita aterrizara en Mordor, la Hobbita aquí presente ha conseguido encontrar amigas con niños en un radio de acción CERCANO. 

Y es que la clave de la tribu está en la cercanía. De nada me sirve tener unas cuantas amigas si las tengo repartidas por toda la geografía de Madrid (o mi mejor amigo que directamente está en Holanda y me pilla pelín a desmano).

¿Como lo he conseguido? Pues en parte por mi constancia y cabezonería y en parte porque se me alinearon los planetas. ¿Por qué digo esto último?

Pues porque un día andaba yo paseando por Mordor con el Mozo y mi Habichuela y me encontré con una antigua amiga del colegio. Del colegio de cuando vivía en Mordor. Embarazada. ^_^. Y no volví a contactar hasta que me escribió un whatsapp preguntándome algo sobre la teta (ya con retoño nacido). Y luego me habló de la existencia de un taller de lactancia en un centro de salud de la zona con entrada libre.

Y allí que me presenté, con ella, con la Habichuela y preñada de la Pulga. Y fui conociendo gente e hice un taller de porteo. Y un día una de las mamis de allí me pidió ayuda para ponerse el fular con su RN pero no pude ayudarla en ese momento porque la Pulga (que ya había nacido) había montado en cólera y después de calmarla a ver quien era el guapo que la sacaba del fular para dar una masterclass. Así que quedamos en vernos en el centro comercial (si, ese del que no salgo así me maten y que JAMÁS de los jamases pisaría. Ese -_-). Di la masterclass. Y al salir del CC con mi amiga nos encontramos con otra mami del taller de lactancia que se veía pelín saturada y propuso hacer tribu de cafés. Que el taller estaba guay pero que había madres demasiado supermadres y que ella lo que necesitaba era desconectar. Y así fue como empezamos un minigrupo de whatsapp de madres desesperadas con mucho sueño y necesitadas de mucho café. 

Otro grupito heterogéneo, con nuestros retoños y nuestros carros generando caos en las cafeterías a las que vamos (mira que abultamos las madres con niños). Con nuestras neuronas que patinan, ayudándonos unas a otras y echándonos unas risas. Y a un whatsapp de distancia (normalmente yo escribo que me voy para el CC y en unos 20-40 minutos ya tengo al menos una compañera de café)

Además, ahora que he pasado la cuarentena, he decidido apuntarme a un local del barrio en el que dan clases de gimnasia postparto pero que puedes ir a ellas con bebés. Me habló de ellas una de las madres del taller y haré esta semana unas clases de prueba pero yo creo que muy mal se me tiene que dar para no quedarme.

Y es que las madres necesitamos por un lado desconectar y estar con otras madres en nuestra situación y por otro lado se nos complica la existencia el desconectar sin niños, por lo que necesitamos centros que los acepten y nos permitan dar las clases con ellos. Ya os contaré pero tiene muy buena pinta el sitio (familiar y la dueña/profa me transmitió mucha paz al hablar conmigo). Y con oferta por la mañana (teniendo en cuenta los precios que se manejan en Mordor >_<).

Por lo tanto, si no tenía suficiente con organizar mi vida alrededor de mis dos pequeñuelas, ahora me voy a apuntar a gimnasia y me voy a tomar cafés con unas cuantas madres siempre que puedo.... Ni tan mal, ¿no? ;)

Y vosotras, ¿habéis logrado hacer tribu con madres de vuestra zona? ¿Lo echáis en falta?