lunes, 28 de septiembre de 2015

Reto Desdetu: ¿Cómo creo que me cambiará la maternidad? (I)



Liela, del blog 'Desde tú' nos ha arrojado un guante vilmente a todos aquellos blogueros que queramos recogerlo y aceptar su desafío, ello es: ¿cómo nos ha cambiado la paternidad/maternidad? Y los que aún no somos padres, ¿cómo nos lo imaginamos?

Yo acepto el duelo desde la segunda opción, aunque creo que nosotras somos madres desde que tenemos el famoso palo con las dos rayitas, pero creo que el concepto del reto se entiende, ^_^. Es divertido porque de aquí a unos meses, me releeré el post y me haré cruces pero mira, así me da la musa para escribir otro y retractarme de todo lo que vierta en el que escriba hoy :p.

Creo que la maternidad nos va a afectar para bien y para mal. En el fondo le empiezo a tener un poco de respeto (aun no es miedo) a ese fatídico primer mes del que todas hablan, aunque sea por encima. Lo estoy viendo en mi amiga, la madre reciente de la que os hablaba en otro post

La maternidad me va a poner a prueba como persona y nos va a poner a prueba como pareja. Y espero de verdad que pasemos la prueba. Viendo a estos amigos de los que os hablo, mi mozo y yo ya andamos comentando como nos apañaremos y anticipándonos a lo que nos viene encima. Así, cuando haya crisis (que creo que las habrá), al menos tendremos algo hablado acerca de como las intentaremos paliar. Algo me dice que al final, nos va a pasar como a estos dos y que hay que pasarlo, como las gripes xD, pero oye, que luego no digamos que nos ha cogido de sorpresa.

[Como soy una petarda con incontinencia verbal y veo que el post me ha quedado larguísimo, lo voy a dividir en dos para que no os de un soponcio leyendo. Aquí va la primera parte]


Vayamos a lo evidente. Para empezar, creo que voy a tener que tragarme mi independencia. No lo puedo evitar, es parte de mi carácter. Mi madre me moldeó así porque tiene una especie de trauma infantil con su madre castradora (léase, mi abuela) así que decidió que yo sería una mociña independiente y segura de si misma. Lo primero lo logró con creces. En lo segundo... ngá.... bueno, supongo que todos tenemos nuestras crisis de seguridad. Lo bueno es que cuento con herramientas para sobreponerme a ello (desde arreglarme solita a buscar ayuda externa, léase psicólogo, si llegado el caso veo que lo necesito sin traumas ni vergüenzas, que para eso están los profesionales). El caso es que, ya desde el embarazo, he notado como mi independencia va mermando. Obviamente con el reposo absoluto que me colocaron nada más empezar se cortó de golpe. Solo tenía permiso para ir al baño. Sin embargo esa etapa pasó y me sigo notando limitada. La Habichuela da órdenes a mi cuerpo sin que pueda hacer mucho. Si estoy cansada, tengo que parar (no puedo forzar 'un poquito más' la máquina). Ayer mismo tuve una especie de abducción extraterrestre vía Habichuela en medio de la Operación Nido que mi mozo y yo estamos acometiendo en la casa. Conclusión: una hora y media con mi mozo haciendo cosas y yo con ojos vidriosos derrotada en el sofá mirando al techo O_O.

Además. todo el mundo está empeñado en que venda a mi moto y yo estoy empeñada en que no, que no pienso venderla porque me da mucha independencia (esa que tanto amo). Soy consciente de que puede que sea cabezonería, pero sinceramente, la necesito. Estoy embarazada, con prohibición de cogerla (obvio) y ya la echo de menos :____(. Intento convencer a mi mozo para que se atreva a cogerla para ir al trabajo y la utilice para ir al gimnasio a la hora de comer y al mismo tiempo él intenta convencerme para que me atreva a coger el coche y empiece a tener independencia con él. Lo más curioso es que uno de los que más insisten en que tengo que venderla es nuestro amigo y padre reciente J., también motero y que NO ha vendido la suya >_<. Tengo dos teorías al respecto: o que él piensa los padres no tienen porqué vender sus motos, solo las madres debemos hacernos responsables de que NO podemos llevar de paquete un churumbel hasta que cumple los 12 años (creo que ahora está en los 12 años, pero no me lo toméis al pie de la letra) o bien que mi mozo (preocupado por mi seguridad) le ha tanteado para que, como motero, hable conmigo acerca de lo solita que estará mi pequeña burra en el garaje y que me convenza para que la venda. Como siempre, haré lo que me parezca más conveniente, jiji.

El mozo y yo ya hemos hablado de como será nuestra futura y bucólica vida familiar. Él dice que quiere coger al churumbel mucho en brazos para que se acostumbre a quedarse tranquilo con él. Así podré darme duchas tranquila y dormir siestas tranquila, que es lo que nuestra amiga echa en falta. A mi me encanta que piense así pero veo al retoño de N. y la verdad, es que es cogerla su padre y se pone a berrear reclamando a 'la señora esa que tiene tetas, que a mi no me engaña usted, señor'. Así que a ver si la teoría de mi mozo de cogerla mucho para que se acostumbre funciona. Si no, pues replantearemos el caso sobre la marcha. 

Creo que se acabó el ir al baño sola (aunque en mi familia he de confesar que somos muy de que uno vaya al baño y le sigamos todos en procesión a continuar la conversación. Es lo que una de mis tías maternas, muy finamente define como: 'Una a cagar y las demás a oler').

Y preparar comidas elaboradas creo que también va a ser complicado porque el bebé demanda muchos brazos y luego más adelante, SE MUEVEN!!! (terror absoluto a que descubra los sesudos mecanismos ocultos para abrir y cerrar cajones). Ahí creo que mi nueva Thermomix me salvará la vida, jiji (he de escribir sobre ella. Desde aquí confieso que si: soy de la Secta).

Tengo mucha ilusión puesta en la lactancia materna y la crianza natural con apego. Y mucho susto si al final no la puedo mantener. Se que puede pasar pero el saber que las cosas pueden ocurrir no lo hará más decepcionante. Porque al fin y al cabo, no tengo la presión que tendréis muchas de volver al entorno laboral y se que soy afortunada por poder dedicarle todo el tiempo del mundo a la Habichuela. Por eso me da tanto miedo la sensación de que, fallar, será todo un fracaso a nivel personal porque al fin y al cabo, es lo único que tengo que hacer en el mundo. (Ejemplo de como lo de la 'seguridad en uno mismo' que comentaba arriba a veces falla). Por otro lado pienso que gracias a las concesiones, la Humanidad ha ido avanzando así que me consolaré un poco. Lo bueno es que nunca he sido una talibán de los principios y las causas así que nos adaptaremos a lo que venga, aunque diste mucho de los planes iniciales de crianza que nos hemos ido haciendo. 

Hasta aquí la primera parte. La segunda, ya mañana....

(Continuará...)



16 comentarios:

  1. jajajaja me he partido de risa con lo de la secta de la thermomix! yo tmb... la utilizo hasta para hacer la sopa de sobre!
    Yo tmb empiezo a pensar en todo lo que me va a cambiar la vida cuando nazca el polluelo... y que dentro de un año ya no valdran los tipicos "bah me ceno una tostadita" habra que ponerse al lio y hacer de buena madre.

    Ya lo notas???

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    1. No eres de la secta hasta que estás en la secta. Hice una sesión con suegros y tíos políticos y nada, no entienden tanto entusiasmo por una máquina tan cara U_U. Lo siento por mi presentadora, ya le organizaré otra sesión, jiji.

      A mi me encanta cocinar y espero no tener problemas a la hora de, cuando nazca el enano, hacer cenas decentes. Dicho lo cual, hay días que, efectivamente, con un tazón de cereales te apañas (o más te vale apañarte). Eso me pasaba sobretodo cuando trabajaba en la clínica, que acababa derrotada muchas veces.

      Y si... ya lo noto! Se mueve, da golpecitos ^_^. Hay días más activos que otros. Ayer por la noche estaba espídico (y yo mirando al techo O_o)

      Un abrazo :)

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  2. Yo también soy de la secta Thermomix!!!!
    Creo que mi mayor reto será organizarme un poco, el piso está siempre hecho un completo desastre y si algún día me quedo embarazada esto será el fin jajajajajaja

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    1. Tengo una palabra mágica para ello: Asistenta!!!

      Ah, y tratar que el síndrome del nido no os posea a ninguno de los dos :P. No veas como tenemos en estos momentos la casa O_o

      Un abrazo :)

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    2. Nosotros en casa le decimos Telmi. jajajaja Pero si, es cierto que es una gran herramienta en la cocina!

      El síndrome del nido nos posee desde hace años jajajajajajajaja somos unos desastres.....

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  3. ¡Deseando leer la continuación!
    Creo que nos parecemos bastante y que nos preocupan las mismas cosas ¡y eso que a mi todavía me queda para buscar! Lo de perder mi independencia me aterra y me encanta a partes iguales, me imagino viviendo mi independencia con mi apéndice y me muero de amor... Aunque a lo mejor en cuanto llegue mi maridín a casa le enchufe al baby y yo me vaya a buscar mi paz interior desesperadamente ¡quién sabe!
    Y con lo de la crianza pienso igual que tú: si es a lo único que tendré la suerte de dedicar mi tiempo y mi vida, ¿qué pasa si no consigo dar el pecho o si me desespera que mi bebé no duerma y acabo con Estivill? (Lo de Estivill es broma -espero-... está vetado en mi casa, es como un nombre tabú porque ya lo usó mi hermana - cuando se reincorporó al trabajo - y mi sobrino empezó con pesadillas y hasta que cumplió los 3 años ha dormido FATAL)
    Creo que son dudas normales, y estoy segura de que cuando nazca tu Habichuela y reescribas la entrada, te darás cuenta de lo bien que lo estás haciendo!
    Un besito
    P.D.: lo de la moto es un tema espinoso, pero yo no la vendería. Yo soy ex-adolescente-motera, y sigo intentando convencer a mi marido de comprarnos una pero nada... :( Una cosa es que no vayas con tu peque en ella hasta que sea más mayor, pero si necesitas hacer un recado cuando ella está con su padre ¿por qué no vas a coger la moto? Me imagino que lo del coche será cuestión de tiempo, cuando veas lo cómodo que es para ir con tu bebé :)
    ¡Y bienvenida a la secta Thermomix!

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    1. Jiji, llevo en la secta Thermomix la friolera de 30 años (básicamente desde que nací) pero el mes pasado me compré la TM31 porque mi pequña TM3300 murió (después de beberse una mermelada de melocotón a 100ºC, todo hay que decirlo U_U).

      Lo que yo estoy viendo con mi amiga es que, al menos en estos primeros meses, el bebé necesita y reclama a su madre, quicir: su marido llega a casa, coge al bebé para que ella se pueda duchar, descansar, comer, dormir.... y al instante se pone a berrear como si no hubiera un mañana. Lo coge ella, se calla. Vuelven a pasarse el bebé a manos del marido y berrea... Conclusión: acaba duchándose en 3 minutos y corriendo para coger a su remolacha cabreada y que se calle xDDDD. Así que una cosa es la teoría y luego como se lo tome el churumbel. ¡Qué miedo!

      Y la moto... no quiero venderla. Efectivamente no pienso llevar a mi hijo encima (faltaría más). Es más, a lo mejor me trago mis palabras dentro de unos años, pero tampoco lo llevaría a partir de la edad legal admitida. Yo de paquete solo llevo adultos. Pero claro, en moto tardo na y menos en hacer cualquier recado, me salto los atascos de Madrid, puedo aparcar sin problemas por el centro... Y no a todas partes voy a llevar al churumbel así que, ¿por qué deshacerme de mi pequeñuela?

      Así que en esas estamos.

      Un abrazo :)

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  4. La crianza natural no es algo que se elige, es una convicción, por eso no puedes fallar. Tendrás altibajos porque en algún momento de crisis te saldrá algo contrario a lo que piensas y quieres, pero somos humanos y fallamos, a veces más que una escopeta de feria.
    Te veo algo agobiadilla y quiero transmitirte tranquilidad. La crianza natural es mucho más que dar pecho y coger al bebé en brazos, se trata de respetar sus ritmos, sus necesidades, afectivas y fisiológicas, de acompañarle en su maduración. Para todo esto tanto da pecho o biberón, por ejemplo. Está claro que la lactancia materna es lo mejor para el bebé, pero si hubiera algún problema para mantenerla no es el fin del apego, ni del vínculo madre/hijo, se puede hacer del momento biberón un momento igual de especial si no nos limitamos únicamente alimentar su estómago, sino que también alimentamos su alma con caricias, palabras bonitas, miradas....
    En fin, que no te dejes presionar por los términos, que son sólo eso, cada familia tiene su propia forma de criar con apego y vosotros sólo tenéis que encontrar la vuestra.
    De la moto y la termomix no me pronuncio, no son santo de mi devoción ninguna! ;-P

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    1. Tienes razón. En realidad me refería a si seré capaz de mantener la lactancia correctamente, la alimentación, etc... Por supuesto no estoy a favor del método Estivill ni lo estaré nunca pero quizás no haga colecho...

      Gracias por los ánimos y la tranquilidad ^_^, se agradecen. No lo había visto desde una perspectiva de términos. Así que si: haré la crianza natural por convicción y tanto da si al final le tengo que dar el biberón siempre que vaya de la mano del respeto.

      Lo de la Thermomix, lo entiendo. Solo los de la secta adoramos a nuestra diosa (WaJAJAJAJAJA!). Pero mi pobre burra se ha ido a llorar a un rincón U_U.

      Un abrazo :)

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    2. Mira que a propósito!!! ^_^

      http://www.marujismo.com/entrevista-a-laura-perales-sobre-crianza-respetuosa/

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    3. Si! Muy bueno! ;-)
      Y por cierto, vi un vídeo hace unos días en el que un periodista, no recuerdo su nombre, hablaba sobre que un hijo implica cambios y muchas personas afirman que a ellos no les va a cambiar, el pregunta que porqué se tiene tanto miedo al cambio, si es bueno cambiar, es un paso más en tu evolución como persona. Me pareció una reflexión muy buena...

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    4. Me gusta esa reflexión. Yo misma he cambiado muchísimo en los últimos 10 años, y sin hijos de por medio! De hecho, lo que los treintañeros de la pandilla comentamos de vez en cuando es de que vamos dejando el contacto con otros treintañeros que, desgraciadamente, se quedaron en los 12 años... Así que el miedo yo creo que no es tanto al cambio si no a que te vengan personitas nuevas a la familia ^_^. Pero nosotros encantados, oiga!

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  5. Todo lo esperas me parece bastante coherente. Seguro que cuando llegue el momento no te importará dejar algo de independencia atrás. Con el tiempo la irás recuperando poco a poco.

    Los papás se las prometen muy felices cuando se proponen ayudarnos (que yo no entiedo que sea una ayuda, es su responsabilidad también). Después, contando con la caca de baja de 15 días que tienen, con que tendrán que volver al trabajo, estarán cansados, necesitarán su rato de desconexión, bla, bla, bla... se van desentendiendo progresivamente. En parte, puedo entenderlos. Y en parte, estaría bien que ellos nos entendieran jjjj.
    Y ojo, que mi marido cambió pañales, bañó al pichón, le dormía en brazos... Claro que el nacimiento del pichón pilló en sus vacaciones. Con la vuelta al trabajo, obviamente, hubo cosas que ya dejó de hacer (no es un reproche, que conste).
    Además, los primeros tres meses es como un "cuarto trimestre de embarazo (extrauterino)" y los bebés necesitan más a la mamá que al papá.

    A ver cómo fluyen las cosas con la llegada de la Habichuela. Me alegra infinito que os guste la filosofía de la crianza con apego. Verás que sale solo, te nace ser así. No como lo del método Estivill que es una p... tortura sin sentido.

    Gracias por esta entrada de "recogida de guante". Estoy deseando ver la segunda parte!

    Abrazo!

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    1. La baja de paternidad es una mierda y encima es voluntaria con lo que muchos padres a la hora de la verdad, sienten el 'miedo' a perder el trabajo (ese que sobrevuela nuestras femeninas cabezas desde que entramos en los temidos 30 años hasta que pasamos los 50)...

      Mi mozo tiene pensado hablar con la empresa a ver si puede juntar días de paternidad con los días por la boda (si en algún momento conseguimos fecha, jiji) y a lo mejor algo de vacaciones pero no se yo si les hará o no gracia.

      La crianza con apego/respeto (madre mía, que de términos) me parece un derecho básico del bebote. Y a mi mozo también le gusta y tiene en mente cogerlo mucho y hacer las cosas que pueda (obviamente puede hacer todo menos la teta) pero efectivamente, yo estoy viendo en mi amiga que la bebota la reclama a ella y solo a ella. A veces la cogemos los amigos y se nos queda mirando ceñuda, reprobándonos con la mirada y sospechando y como tarde mucho su mamá se pone a gritar como una descosía (es TAAAAAN mona). Y llega Mamá, la coge, y se calla al momento (y nos vuelve a mirar con sospecha por encima del hombro de mami xD). A mi me resulta muy tierno pero mi amiga a veces tiene momentos de agobio que yo veo totalmente normales.

      Hoy, la segunda parte ;)

      Un abrazo :)

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  6. Hobbita, me da la sensación de que quieres tenerlo todo planificado, y el problema que tiene eso es que si luego las cosas no salen como las tienes en mente te llevarás una gran decepción. No lo hagas, de verdad. Si unas vacaciones casi nunca salen como se habían planeado, imagina algo en lo que interviene una persona de la que además desconoces su forma de actuar y pensar. Es imposible planificarlo todo con un bebé. Demasiadas variables. Déjate llevar, ve haciendo lo que el bebé te pida, y sobre todo no te agobies. Date tiempo para asimilar los cambios en tu/vuestra vida. Vas a ser una madre excelente, lo único que te hace falta para ello es llenar de cariño a tu Habichuela y a Marido. Y me da la sensación de que se eso tienes más que de sobra. Besitos

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    1. Si, si! Nosotros somos muy de planificar. afortunadamente también somos flexibles y capaces de amoldarnos rápidamente a las situaciones según nos llegan (que esa parte todavía no la hemos podido reflejar en el blog porque todavía no hemos llegado a la parte práctica del asunto Bebote) así que nos decepcionamos poco.

      De todas formas, este post no es tanto de planificación como de imaginación: la respuesta al reto que nos arrojó desde su blog Liela en la que nos invitaba a reflexionar sobre como nos cambió la maternidad/paternidad y, los que aún no éramos padres, que imagináramos como iba a ser el momento en el que nos convirtiéramos en padres y, una vez tuviéramos el churumbel, releer el post y reescribir otro con lo que nos habíamos encontrado en realidad. Así que a este post todavía le queda mucho recorrido por hacer :D.

      Gracias por comentar y por ver que tenemos (el Mozo y yo) cariño a raudales que darle a la Habichuela y es que, ya lo decía el anuncio: lo único que hace falta es amor del bueno.

      Un abrazo :)

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